Fecha: 8 septiembre, 2025

El ganador del Concurso Mundial de Pinchos y gerente de ‘El Trasto’ dio el pistoletazo de salida a las patronales poniendo de relieve el “sentir tordesillano” y repasando sus vivencias en la villa

Desde primera hora de la mañana, y con el nerviosismo propio del inicio de los festejos, los tordesillanos y tordesillanas se vistieron este lunes con sus mejores galas y, de punta en blanco, fueron llegando a la iglesia de Santa María para acudir a la misa en honor a la virgen de la Guía, que sería el primer plato del menú que se estaba cocinando en la localidad; el comienzo de las fiestas patronales.

Tras la eucaristía, mayores y pequeños sacaron en procesión a la patrona, y después de devolverla al templo, regresaron ansiosos a la Plaza Mayor para coger sitio para uno de los momentos más esperados de la jornada, el pregón de fiestas que daría el pistoletazo de salida a las fiestas, y acaparando todas las miradas en la balaustrada, el pregonero, el chef Teo Rodríguez, comenzó a recitar el menú de los festejos en un discurso cargado de ingredientes como la nostalgia, los recuerdos, la tradición y el sentir tordesillano.

Gerente del restaurante ‘El Trasto’ y ganador del VIII Campeonato Mundial de Pinchos Ciudad de Valladolid, Rodríguez fue desgranando su receta de la Villa del Tratado comenzando por el elemento, o más bien la persona, que lo vincula directamente con el municipio; su abuelo. “Igual muchos no lo sabréis, pero mi abuelo fue alcalde de Tordesillas durante 18 años, y a lo largo de toda mi vida he escuchado cómo eran las fiestas en aquella época, cómo era organizarlas y cómo las vivían los tordesillanos, y si hay algo que se mantiene siempre en el tiempo es el sentido de identidad que todos nosotros ponemos a fuego máximo durante estos días”.

Asimismo, el pregonero contó también alguna que otra anécdota sobre sus corredurías durante las patronales, haciendo hincapié en que “cada rincón del pueblo tiene un recuerdo bonito o un momento inolvidable para mí, y eso lo saben mejor que nadie quienes me acompañaron en todas aquellas aventuras”, apuntó el orador, ganándose el aplauso de la multitud y las carcajadas la ovación de aquellos que se dieron por aludidos.

Teo Rodríguez no quiso finalizar su discurso sin antes poner de manifiesto el “gran orgullo” que siente de ser tordesillano y de haber tenido la oportunidad de abrir los festejos, algo que “haría sentir orgulloso a todos aquellos que ya no están pero que siempre llevo conmigo”. Y concluyó, como no podía ser de otra manera, deseando unas fiestas “divertidas y con esa hermandad característica” y al grito de “¡Viva la Virgen de la Guía! ¡Viva la Virgen de la Peña! y ¡Viva Tordesillas!”

Por su parte, Miguel Ángel Oliveira agradeció a pregonero sus palabras y el “llevar un poco de Tordesillas allá por donde vas y que un poco de nosotros también esté en cada una de tus recetas”. El regidor culminó su alocución deseando felices fiestas a todos los vecinos y con una nueva ola de vivas “¡Viva la Virgen de la Guía! ¡Viva Tordesillas! y ¡Viva el Toro Vega!”

Acompañando al pregonero y a la corporación, a la cita también el vicepresidente de la Diputación de Valladolid Víctor Alonso además de varios diputados provinciales a los que se sumaron y alcaldes y concejales de los municipios aledaños.

La jornada continuó con el desfile de Gigantes y Cabezudos, entre la Plaza Mayor y Gutiérrez Mellado –acompañado por la charanga Sal del Compás- para después dar paso al concierto del grupo LEVID Folk y de Ayuso.