Fecha: 15 julio, 2025
Paco Fernández, gerente de la empresa, desglosa los diferentes proyectos que se van a poner en marcha en la localidad y expresa su deseo de que la nueva delegación, que se inaugurará el 24 de julio, “sea una de las más potentes, ya que también nos permitirá tener salida a otras zonas de España”
Llegada desde León y con el futuro y la mejora del mundo rural como impronta, iRiego aterriza este mes de julio en la Villa del Tratado con el objetivo claro de ofrecer a la comunidad de regantes de Tordesillas unos servicios mejorados y modernos que permitan a los agricultores generar beneficios y ahorros de agua de una manera sencilla. Su gerente, Paco Fernández, desgrana las distintas ideas que desde la empresa tienen para esta nueva sede.
Por ponernos en antecedentes, ¿qué es iRiego y qué es lo que ofrece a sus clientes?
iRiego nace hace doce años con la finalidad de hacer regadíos modernizados donde los agricultores pasan de regar por acequia a poner estaciones de bombeo y demás sistemas. En un momento dado una serie de personas creamos la empresa para cubrir esa necesidad, pero ofreciendo muchos más servicios, tanto a la comunidad de regantes como a los agricultores con el fin de que estos puedan explotar sus cultivos en su totalidad, y con el tiempo hemos pasado de cinco personas que fuimos al comienzo a más de cien que trabajan y dan servicio a miles de agricultores con unos sistemas muy tecnificados mediante aplicaciones móviles.
Tenéis presencia en distintos puntos de la Comunidad y de España, ¿qué os ha llevado a abrir una nueva sede en Tordesillas y qué se va a ofrecer en ella?
Es verdad que tenemos sedes en Villalón de Campos, Valladolid, Salamanca, Palencia, Navarra… y ahora en Tordesillas. Y es que es un municipio en el que siempre se nos han dado muchas facilidades, tanto por parte del ayuntamiento como por parte de la comunidad de regantes y la gente, y su ubicación también nos parecía muy favorable, así que desde el principio hemos tenido claro que sería una delegación potente con salidas a otras zonas de España.
Queremos ofrecer en ella nuestra experiencia para generar nuevos servicios que los agricultores cada vez van a demandar más, los cuales pasan por ganar tiempo en el mantenimiento de instalaciones, poder disponer de tecnologías mucho más punteras en el control de sus riegos para manejarlos desde el teléfono o poder generar ahorros de agua.
¿Dónde se va a ubicar esta nueva instalación y qué va a suponer para el municipio?
La oficina estará en la calle Federico Riera Marsá, 12, y para Tordesillas no solo va a ser un punto de creación de empleo, ya que ahora mismo tenemos contratadas allí seis personas de la zona y nuestra pretensión es que para el próximo año lleguemos a unas doce o quince, sino que a través de él vamos a generar servicios de reparación y servicios añadidos a los regantes con los que podrán tener mejoras en producción y ahorros de agua.
Sobre la inauguración del día 24, ¿en qué va a consistir el acto?
El evento comenzará a las once y, una vez que recibamos a la gente, entregaremos un peluche a todos aquellos que lleguen con niños y ofreceremos una actividad creativa para los más pequeños, mientras los papás nos conocen y se llevan una planta como regalo. Además, contaremos con la presencia de los presidentes de las comunidades de regantes, los alcaldes de la zona y alguna que otra autoridad.
En cuanto a la filosofía de iRiego, ¿cómo se aplica en el trabajo diario?
Nuestra filosofía es velar por el mundo rural, y algo que hemos conseguido es que el 95% de las personas de iRiego sean de pueblo, y eso nos da un dinamismo distinto, ya que es una empresa hecha en los pueblos y bajo una línea que busca solucionar problemas en cualquier momento -24 horas 7 días a la semana-, una manera de pensar y de hacer o arreglar las cosas cuando pasan que es muy de los pueblos, y eso nos está funcionando muy bien, no solo de cara a los clientes, sino también en nuestros empleados.
Asimismo, somos una empresa muy horizontal, es decir, todos somos iguales, pero cada uno tiene su misión. Tenemos mucha cercanía, mucha gente joven e intentamos que nuestros empleados estén contentos y se diviertan y disfruten cuando trabajan.
¿Cuáles cree que son los grandes retos del regadío en los próximos años?
Estamos en un proceso de digitalización muy potente y la agricultura está muy modernizada. Partiendo de esa base habría que pensar en combinar las producciones con el agua, es decir, empezar a analizar de manera coherente cuándo hay que regar para sacar el máximo beneficio y que eso pueda estar bastante automatizado sería un gran reto. Y luego también introducir la imagen, de tal manera que con cámaras que enfoquen a sus cultivos, los agricultores puedan saber o prever qué puede ir pasando con ellos sin estar tan presentes.
También nos gustaría que se retomase el cooperativismo, eliminar intermediarios para que el agricultor, con el mismo trabajo, genera más beneficios, pero eso es una guerra más dura, así que de momento nos centraremos en lo tecnológico.
¿Qué otros proyectos tiene iRiego para la delegación de Tordesillas?
En iRiego tenemos un proyecto muy bonito para combatir la soledad en los pequeños municipios, llevando comida a diario a las personas mayores, contactando con sus familiares en caso de verlos mal, etcétera, y aunque no tienen ningún fin económico, es algo que nos llena. Sabemos que Tordesillas tiene mucha vida y mucho que ofrecer, pero sí que queremos llevar este servicio a los pequeños pueblos de alrededor o a la gente que pueda necesitarlo.