Fecha: 11 septiembre, 2019

Con 22 integrantes y dos décadas de historias inolvidables, la peña abrirá sus puertas el próximo lunes 16 de septiembre para celebrar su aniversario con una fiesta de Djs

Lo que comenzó, hace ya veinte años, como una humilde peña formada por siete personas, se ha acabado convirtiendo, con el paso del tiempo, en una de las pandas juveniles más participativas de Tordesillas. ’El Tarambuco’, que llegó a rozar el medio centenar de integrantes en su momento más álgido -y que cuenta con 22 miembros en la actualidad- mirará este 2019 hacia atrás para hacer balance de estas dos décadas de diversión, ilusiones y pura pasión. Así, el próximo 16 de septiembre abrirá las puertas de su local -ubicado en la calle San Pedro- para celebrar, junto con los vecinos y visitantes, esta particular efeméride. Paralelamente, celebrarán una comida de hermandad con todos los fundadores de esta gran familia.

“Han sido veinte años de muchos cambios”, apuntan los peñistas, quienes han demostrado un gran espíritu de participación en el concurso de faroles, del que ganaron en la modalidad infantil en 2001 y 2002 y en la de adultos en 2013. Desde entonces no han dejado de concursar, animando además al resto de peñas jóvenes a seguir su estela. Dejar atrás las tradiciones no es una opción para los miembros de ’El Tarambuco’, quienes también se hicieron con el arrastre en 2012 -lo que les permitió disfrutar de una gran experiencia- y han despuntado además en otros eventos como el Grand Prix o el Fútbol Vaca.

La ilusión es la seña de identidad de los integrantes de ’El Tarambuco’, quienes apuntan que “siempre intentamos mejorar lo que hacemos, incluso poniendo dinero de nuestro bolsillo y muchas veces perdiéndolo, simplemente para que las fiestas mejoren y la gente disfrute”, apuntan, incidiendo en el “esfuerzo que supone costear las fiestas para una peña que no es tan multitudinaria como otras”. Pese a todo, continúan apostando por poner toda la carne en el asador, cada año, y fomentar la apuesta por los eventos populares.

“Actualmente los festejos y corridas se van perdiendo porque los jóvenes no salen como antes, prefieren encerrarse en cuartos a hacer botellón. Es una pena, porque si no seguimos nosotros las tradiciones, ¿Quién va a hacerlo?”, reflexionan. En general, consideran que la prohibición del Torneo del Toro de la Vega ha afectado negativamente a las fiestas de la Peña. “Es algo insustituible, el motor de todo y lo que marcaba la diferencia de nuestras fiestas”, afirman, a la vez que reividican la vuelta del desfile de carrozas, “aunque sea tomando medidas como escoltarlas para mantener los límites de velocidad”.

Con la vista puesta en estas dos décadas y en todos los años que quedan por venir, ’El Tarambuco’ volverá a lucir su traje azul estos días para reivindicar la continuidad de la tradición y una manera de vivir las fiestas que implica saber compartir y hacer disfrutar al máximo a la gente que les rodea.