Fecha: 25 marzo, 2023

La instalación será financiada al 50% entre el Itacyl y los regantes, y se aplicará a una zona regable que abarca 2.300 hectáreas entre Tordesillas, San Miguel del Pino y Torrecilla de la Abadesa, con dos plantas fotovoltaicas con una potencia de 2,4 megavatios

La Junta de Castilla y León, a través del Itacyl, ha publicado en la plataforma de contratación del sector público la licitación de las obras para iniciar los trabajos de instalación de dos plantas fotovoltaicas en autoconsumo para la modernización del regadío de la comunidad de regantes del Canal de Tordesillas, Fase II, en Valladolid, por un importe de licitación de tres millones de euros, con un plazo de ejecución previsto de ocho meses.

Las obras constan de la instalación de dos parques solares fotovoltaicos para suministrar energía eléctrica a las estaciones de bombeo de la citada comunidad de regantes, situadas en los términos municipales de San Miguel del Pino y Tordesillas, y contarán con una potencia instalada de 2,4 megavatios.

Canal de Tordesillas

La comunidad de regantes del Canal de Tordesillas administra una superficie regable cercana a las 2.300 hectáreas en los términos de Tordesillas, San Miguel del Pino y Torrecilla de la Abadesa, en Valladolid.

Esta actuación se realiza en aplicación del convenio de colaboración entre el Itacyl y la comunidad de regantes para el pilotaje de sistemas innovadores y sostenibles de suministro energético para el riego basados en energías alternativas, por el que se estableció el régimen de financiación, correspondiendo un 50 % al Itacyl y un 50 % a la comunidad de regantes.

Con esta actuación «se avanza en el compromiso de la Junta de Castilla y León de impulsar la eficiencia energética, incidiendo en las actuaciones relacionadas con el uso de agua y, de manera especial, para reducir los costes de producción de las explotaciones de regadío donde el consumo de energía tiene un peso importante en la factura que deben soportar los cultivos».

«Esta instalación dotará de una importante independencia energética a la comunidad de regantes y supondrá un notable ahorro energético para los agricultores, lo que implica una sustancial mejora en la competitividad de sus explotaciones», señalan desde la administración autonómica.