Fecha: 22 marzo, 2020

La corporación municipal publicará un decreto con medidas más restrictivas para paralizar la pandemia, donde se pide además la suspensión de todas las actividades empresariales en el municipio salvo las esenciales

Ante la grave situación que está padeciendo Tordesillas con el foco de afectados por el coronavirus, el alcalde, Miguel Ángel Oliveira, con el apoyo de la corporación municipal, pondrá en marcha mañana lunes, un decreto con más medidas restrictivas para intentar frenar la pandemia.  Entre ellas se encuentra exigir la aplicación de sanciones ejemplares a los que incumplan el confinamiento, limitar drásticamente las salidas del domicilio, control del movimiento de vehículos a otros municipios o zonas rurales, controlar las entradas de vehículos al municipio, crear una guía de recomendaciones para realizar las compras en comercios y supermercados etc.

El decreto entrará en vigor mañana y estará vigente hasta que se estime oportuno. “Está en juego la vida de muchas personas. El sistema sanitario puede colapsar y tener que aplicar el modelo de «medicina de guerra”, teniendo que realizar elección selectiva de los pacientes es insostenible”.

España cumple 50 días desde que se detectó el brote el 31 de enero y por el momento está descontrolada la propagación del virus. Hoy domingo, se ha publicado oficialmente de que ya hay 28.572 positivos y 1.720 fallecidos por el Covid-19 en España y en Castilla y León suma ya 1.744 positivos de coronavirus y 3.500 sanitarios en toda España.

Por eso, el alcalde, Miguel Ángel Oliveira, va a solicitar al gobierno de España, siempre con el máximo respeto y lealtad institucional, que imponga nuevas restricciones, con el objetivo de conseguir que la gente se quede en sus casas y los contagios desciendan. “Ya no sé cómo decirlo: sólo con la limitación extrema de los contactos interpersonales podemos tratar de evitar los contagios».

Nuestro alcalde solicitará la paralización de todas las actividades empresariales en el municipio de Tordesillas, de todas aquellas producciones que no forman parte de las cadenas de suministro ‘esenciales'». Reconoce que la decisión de interrumpir «las actividades productivas es competencia del gobierno de España «, pero admite que conversará con «representantes de las asociaciones empresariales», para pedirles responsabilidad y cierre total de sus empresas.