Fecha: 6 abril, 2020

El alcalde Miguel Ángel Oliveira  ya piensa en el “día después”, donde ve necesario utilizar el superávit y los remanentes de tesorería para llevar a cabo iniciativas que ayuden a reactivar la economía de la localidad

“Toca prepararse para la salida de la crisis. Tenemos que reactivar la economía, y es momento de ponerse a trabajar en un plan de choque” aclara el alcalde de Tordesillas Miguel Ángel Oliveira. El primer edil convocará a una comisión de seguimiento del COVID-19 para elaborar un conjunto de iniciativas que sirvan para reactivar la economía local una vez hallamos superado esta pandemia.

De acuerdo con los servicios económicos y con la oficina de gestión presupuestaria, Tordesillas liquidará el presupuesto de 2019 con remanente de tesorería y con superávit. A todo ello se suma el cumplimiento de la regla gasto, lo que ayudará a que el consistorio dedique sus esfuerzos económicos en paliar los efectos de esta crisis. Para ello, tal y como manifiesta Oliveira,” será  necesario que el Ministerio de Hacienda flexibilice las condiciones económicas que impone a los ayuntamientos desde el año 2012, cuando la deuda pública estaba disparada. No  comparto que el Ministerio de Hacienda se apropie de remanente y superávit de los Ayuntamientos para financiar sus propios gastos, sobre todo ahora cuando el papel de las entidades locales va a ser fundamental para paliar los efectos de esta pandemia”.

Desde el consistorio , recuerdan que la famosa  “ley Montoro, fijó límites en el techo de gasto de los ayuntamientos, restringió el uso de remanentes líquidos de tesorería y obligó a que el primer destino del superávit que puedan generar las administraciones locales sea pagar deuda. Es decir, que vaya para entidades financieras». Por ello, se plantea la necesidad de utilizar el superávit y los remanentes de tesorería además de flexibilizar la Regla de Gasto y la Ley de Contratos.

Reducción del plazo de pago a proveedores

En los últimos diez días, el Ayuntamiento de Tordesillas ha acelerado el abono del mayor número de facturas a proveedores. Eso supone triplicar el ritmo habitual de pagos de la administración local, algo que agradecemos expresamente a los funcionarios implicados, muchos de los cuales trabajan desde sus domicilios.

También se ha aplazado el cobro del impuesto de vehículos -los que salían al cobro en estas fechas-, y se ha propuesto una modificación del calendario fiscal.

Tras la reunión de la comisión de seguimiento, como alcalde se siente “orgulloso” tanto del comportamiento de los servicios municipales como de los ciudadanos de Tordesillas en general, “que están a ter un comportamiento exquisito”. Relevante papel están teniendo durante estos días Protección Civil y Cruz Roja, que coordina una base de datos de entre 8 y 10 voluntarios. Desde el propio consistorio se insiste en la prioridad mientras esté en vigor la alerta sanitaria, es la atención a los más vulnerables y a nuestros mayores.